Uno de los platos más representativos de la cocina vasca y por ende de
la gastronomía española, son sin duda los chipirones en su tinta. Reconocibles
fácilmente por su tosco aspecto y su color negro grisáceo, su degustacion nos
sorprenderá por su agradable sabor y textura.
Cierto es que no es un plato sencillo de preparar, ya que un exceso de
tinta o una mala cocción del chipirón arruinara fácilmente un plato que
cocinado en su justa medida embelesa el paladar de los más exigentes.
Tampoco es una receta del gusto de todos, debido principalmente al
sabor tan particular de la tinta. Un intenso sabor marino, yodado y bastante
salino que si se maneja en su justa medida nos proporcionara platos excelsos,
pero si por el contrario se añade en exceso, arruinara sin duda el resultado
final.